Revista Digital CECAN E3

Examinar. Entender. Evaluar

Apuntes de la renta básica universal

Relación entre bancos centrales, emisión e inflación.

La Renta Básica Universal es un mecanismo que muchos vienen discutiendo para aliviar la situación económica de la población no solo en Colombia, sino en todo el mundo. Consiste en otorgar un ingreso mínimo como derecho a los ciudadanos de un territorio. Se espera que con esta renta, el ciudadano solucione todas o al menos parte de sus necesidades básicas.

Para mi, ese mecanismo no difiere mucho de mecanismos de estados de planeación central en los que el estado entrega ropa y/o comida con cupones, aunque con la renta básica el ciudadano podrá escoger en que se la gasta (al menos al principio, luego quien sabe). De hecho, con beneficios que ya tenemos como el SISBEN del sistema de salud, Familias en Acción, Ingreso Solidario y otros programas del Departamento de Protección Social hemos recorrido parte del camino en ese sentido.

Sin embargo, el gran problema de otorgar una renta Básica Universal ni siquiera es de donde el gobierno va a sacar la plata, obviamente será de impuestos a los trabajadores (via impuestos directos o alzas en los precios que los empresarios le trasladarán al consumidor) o de emisión primaria de moneda. El gran problema es que esa Renta Básica Universal, puede terminar generando inflación al aumentar la cantidad de moneda  circulando en la economía.

De acuerdo con la página del Banco de la República, tenemos que «Según la Constitución, el principal objetivo de la política monetaria es preservar la capacidad adquisitiva de la moneda, en coordinación con la política económica general, entendida como aquella que propende por estabilizar el producto y el empleo en sus niveles sostenibles de largo plazo. En ejercicio de esta función adopta las medidas de política que considere necesarias para regular la liquidez de la economía y facilitar el normal funcionamiento del sistema de pagos, velando por la estabilidad del valor de la moneda. Las funciones especiales asignadas al Banco comprenden la de regular la moneda, los cambios internacionales y el crédito, emitir la moneda legal colombiana, administrar las reservas internacionales, ser prestamista y banquero de los establecimientos de crédito y servir como agente fiscal del Gobierno.» https://www.banrep.gov.co/es/funciones#:~:text=Las%20funciones%20especiales%20asignadas%20al,como%20agente%20fiscal%20del%20Gobierno.

El Banco de La República en Colombia maneja las políticas monetaria, de intervención cambiaria y crediticia, todos con la intención de cumplir la estrategia de inflación objetivo año a año.  Es decir que el banco emite moneda, compra o vende divisas y establece tasas de interés, encaje y montos de crédito a los bancos,  todo como mecanismos para mantener la inflación en la cifra objetivo del gobierno de turno.

Ahora pensemos en la economía de un territorio. Para que una economía se considere dinámica, debe haber suficiente moneda en circulación para que los compradores y vendedores puedan hacer sus intercambios comerciales eficientemente. En esto intervienen tanto la cantidad de moneda como la velocidad con la que los usuarios la intercambian por bienes. Con la misma cantidad de moneda, entre más rápido la intercambien por bienes, más ciudadanos intervienen en los diferentes intercambios y se benefician del uso de la moneda, y más dinámica se considera la economía. Pero si empieza a subir la cantidad de moneda disponible sin disminuir la demanda, los precios de los bienes pueden empezar a subir generando inflación para lo que el banco central puede aumentar el encaje o aumentar las tasas de interés, tratando de limitar la moneda disponible. Normalmente, con esas medidas y combinaciones de ellas, el Banco de la República ha sido capaz de mantener la meta de inflación en Colombia.

Pero resulta que existe una emisión de moneda que el banco no puede controlar del todo. Esta emisión (emisión secundaria), consiste en los cupos de crédito que los bancos, o los vendedores o empresas diversas emiten para que los consumidores puedan acceder a compras muchas veces en otros establecimientos y no solamente en los propios. Un ejemplo son las tarjetas de crédito de las entidades financieras, pero los cupos de crédito otorgados por empresas de servicios o cualquier empresa comercial también afectan la moneda disponible en el territorio. Mientras la economía sea dinámica y la mayoría de los beneficiarios de esos cupos de crédito mantengan al día sus pagos, no hay problema.

En Colombia los últimos años, el endeudamiento de los hogares ha venido aumentando año a año. En agosto de 2019 este endeudamiento se situó en 243,9 billones de pesos y se estima que el 66% (156,1 billones) correspondía a créditos de consumo https://www.larepublica.co/finanzas/deudas-de-consumo-y-vivienda-de-hogares-2019-reporte-estabilidad-financiera-banco-republica-2938025#:~:text=Del%20total%20de%20las%20deudas,seg%C3%BAn%20cifras%20del%20banco%20central. Podríamos  asumir que esos 156,1 billones de crédito de consumo han sido emisión secundaria, y que por lo tanto han sido componente importante (29,9%) de la base monetaria que en agosto de 2019 era 520,4  billones de pesos https://totoro.banrep.gov.co/analytics/saw.dll?Go.

Antes de la pandemia, esa segunda emisión (30% del total de la base monetaria disponible en el país) se encontraba circulando entre los consumidores y los diferentes proveedores de productos y servicios, dinamizando la economía y oxigenando todos los diferentes sectores de la misma, sin afectar la inflación. Pero ahora, después de 6 meses de pandemia, muchos sectores de la economía se han frenado, reduciendo el acceso de la moneda en circulación a sus proveedores, lo que a su vez frena otros sectores de la economía.

Por otra parte, muchos deudores han tenido que dejar de pagar sus obligaciones con las entidades que les otorgaron  esos cupos de crédito que dieron lugar a la emisión secundaria. En la práctica, eso es como si se estuviera sacando moneda circulante del sistema económico lo cual reducirá aún mas el dinamismo de la economía, y podría llevar a una deflación (en julio ya se reportó una caída del IPC del 0,38%).

Por estas razones, considero que el Banco de la República debe inyectar moneda a la economía colombiana, puede ser a través de una emisión primaria que reemplace la emisión secundaria que se está perdiendo, o mediante una especie de  jubileo a los deudores para que se recupere la dinámica económica que se venía dando antes de la pandemia. La premisa es que se debe recuperar de alguna manera la base monetaria prepandemia y restablecer o mejorar las condiciones económicas de los hogares en enero. Y se debe encontrar un mecanismo para que esos dineros lleguen directamente a los hogares colombianos y no queden en los intermediarios financieros a menos que sea mediante el pago de deuda de los hogares o jubileo.

Por: PABLO ANTONIO PEREZ VALENCIA.