Revista Digital CECAN E3

Examinar. Entender. Evaluar

De la propaganda a la agitación, sin pasar por la reflexión

La propaganda habita las imágenes y las reflexiones mínimas, con información muy limitada. La gran gran masa se mueve en esa frecuencia y mina el camino de la comprensión con la fragmentación de la información.  

La agitación es una movida de la propaganda, que en otro momento preparó al público con el objetivo de comprar y ahora llama a la insurrección popular. Aquí el escándalo es una herramienta útil, igual la indignación y eso se unta de algunos culpables visibles, funcionando con muy alto grado de efectividad en este #ParoNacional2021 

La reflexión es un asunto de escuchar antes que todo y relacionar esa escucha en matrices de interpretación, cuya potencialidad depende en grado sumo de la sensibilidad para el acopio de datos. La riqueza o pobreza de la reflexión no se mide solamente en la agudeza de la imagen (que solo sería propaganda si ahí queda) sino en la pertinencia, que es la que otorga valor a dicha reflexión. 

En la pertinencia ya no se habitan solo asuntos de la razón, lo cual en un relacionamiento hegemónico de lo masculino es lo que cuenta, sino también en el sentimiento (Kush). Y en esa agitación mediática, una tormenta, me recuerda una amistad angustiada, que en Cali van más de 60 muertos en este paro y reflexiono.

Después de darlo todo para alentar el heroísmo ¿Qué querían? ¿Que este régimen cediera la silla cortésmente? ¿Qué creían? ¿Que enfrentar como sea para sostener una barricada era lo más útil? ¡Si se tomaron fotos con la primera línea! Y difundieron por doquier imágenes heroicas, como la de un joven deteniendo el chorro de la tanqueta que tuvo más de un millón y medio de «me gusta»; resalto esta por lo hierática y efectiva en su llamado a identificarse con un ser humano prácticamente indemne sostenido por un latón, contra una máquina de la que sale un chorro antimotines y todo en contrastes claroscuros con un paisaje de piedras alrededor; bastante retocada sin desmerecer.

Y en este escenario, en una ciudad en paro como Cali, la fuerza pública es acusada de la mayoría de esos más 60 asesinatos y cientos de desaparecidos y decenas de ¡violaciones! En una ciudad que en algunos fines de semana arrebatados del día de la madre morían hasta cuarenta personas en hechos de violencia doméstica, la gran mayoría, ahora la fuerza pública se equipara a esa horda dispersa poniendo el tejido social en una precariedad de guerra del Estado contra la población que protesta. Eso lo tenemos que tener muy claro, para no seguir especulando que mantener la presión obligará al contrincante a bajar la guardia. El escenario de enfrentamiento del hoy #ParoNacional2021 ha mostrado que la gente que concurre está dispuesta a morir y que eso hace parte de su cotidiano vivir.

Lo peor es que al salir a recoger su muerto, la familia que lo entierra y le hace el velorio, recibe del gobierno la infamia, o la insurrección se encarga de insultar si es contrario. 

A este baile le falta estrategia popular que cale en la masa insurrecta, refunfuña un insurrecto de hace 35 años. Le hace falta un enfoque compasivo y mucha inteligencia colectiva en el sentido de Paulo Freire, dice ahora reflexivo. Porque a la hora de decidir, quienes se enfrentan en la barricada han tomado la determinación de matar y morir, siendo muy grave que una de las partes involucradas sea la fuerza pública. La gravedad del hecho aumenta con la militancia del gobierno con el uribismo y la poca o nula reacción del Congreso.

¿Y la barricada por qué sigue ahí profe, me puede explicar? Me pregunta alguien lejos de la barricada y muy cerca de la sensibilidad social que ahora no puede ejercer en la calle por asuntos laborales; ella tiene 40. Él, que tiene 30 y ejerce profesión y militancia en la calle, me explica que ya les dijeron que saben a qué se exponen y que a pesar de eso “siguen plantados profe”. El horario no funcionó. Y sigue el pedido de auxilio: «nos están matando». Sigue la ceguera me dice él, porque en el día no llega ni un funcionario a ofrecer NADA. Se movilizan los abogados a garantizar DD.HH. y el debido proceso; y del diálogo solo queda la voluntad a la cual falta ponerle práctica.

Si se mira compasivamente la barricada, son un grupo de jóvenes sin ciudadanía, sin autoridad (propia o ajena) que ponga la clave en otra frecuencia que no sea “darse en la jeta con el tombo” o “dispersar a esos vándalos”. Otra frecuencia que apunte a lo ciudadano, como lo han intentado las bibliotecas populares, las actividades de comunidad en torno a la olla, los clubes deportivos y de juego. Si va quedando la marginalidad de la marginalidad tras la barricada y contra la barricada, ahí orbitando sin un cariño de comunidad los jóvenes enfrentados con o sin uniforme, el primer acto reparador de los Cabildos podría ser abrazar a quienes podrían ser ciudadanía activa y protestan, reclamando una institucionalidad comprometida con el DIH y la Reparación, y ¿cómo nos van a creer ahora si antes no se les ha cumplido? Me interpelan. Todavía hoy #ParoNacional18J reporta agitación y muerte, la urgencia manifiesta sigue.

A la inteligencia colectiva le interpela la inteligencia intelectual interesada en darle curso a la protesta cuidando de la vida, sin que sea escuchada o atendida por las hordas que agitan la revuelta, frente a lo cual la oposición (Petro y otros) en repetidas ocasiones han denunciado intereses mezquinos de buscar un estado de conmoción interior; quienes insisten en la barricada no atienden el llamado a enfrentar con inteligencia la arremetida de la Fuerza Pública y con estrategia un régimen que aún comanda los grandes medios de opinión. 

Oteando la agitación de los imaginarios se puede percibir que la inteligencia intelectual que incide en decisiones circula en redes sociales y la que más mueve ha perdido sintonía en la barricada y su entorno inmediato, si insisten en levantarlas; el trino tiene su sintonía en jóvenes integrados a las tecnologías de la comunicación, el porcentaje es bajo, aunque la incidencia  de las tendencias de TW en la Alcaldía sea alta. Instagram comanda la movida de masas juveniles y su agitación llegando la tropa de fotografos con enfoques atractivos y texturas pregnantes; los blogs reflexivos, siguen siendo marginales a lo masivo pero con impacto en tomadores de decisiones.

CODA: Esta coyuntura ¿ha ayudado a distanciar trayectos juveniles del activismo barrial y popular o  los ha entrelazado? Algo a indagar, pues han tenido una experiencia, que marca como acontecimiento.