Revista Digital CECAN E3

Examinar. Entender. Evaluar

El Puente Ortiz

Por: Juan Pablo Suarez Fiat

Conozco el centro de Cali que yo recuerde desde mis 4 años en 1957, nos llevaban a mis hermanos y a mi al Paseo Bolívar a ver el cambio de guardia a eso de las 5pm en el Batallón Pichincha, se hacía homenaje a Simón Bolívar y se izaba el tricolor nacional.

Más grandecitos mi papá nos llevaba a la obligatoria lustrada de zapatos en la Plaza de Cayzedo antes de la misa en San Francisco y muchas veces se alternaba el paseo con el matinal que presentaban en el Teatro Aristi de la calle 10 o el Teatro Bolívar en el parque que lleva el mismo nombre.

Recuerdo mucho acompañar a mi padre a su oficina de la calle 12 con carrera 7 para lo cual cruzábamos el Puente Ortiz y no dejaba de causar un berrinche porque no alquilábamos un cómics en los puestos del Paseo Bolívar.

El Hotel Alférez Real existía y llegando a la Plaza de Cayzedo era muy normal poder saludar al Sr. Artemo Franco, Ulpiano Lloreda o distinguir a don Edmond Zaccour.

Así existiera la Galería Central no dejaba la Calle 12 de tener una imagen señorial y no era difícil ver a don Jorge Arabia con una pieza de tela en sus hombros ;los hermanos Malca o saber que el Almacén Fantasías Femeninas o el Almacén El Barato de don Pedro Sellares de la calle 12 exhibían las mejores modas.

Podríamos decir lo mismo años más acá cuando don Guido Franco o Alonso Restrepo protagonistas de la moda masculina venían a su lugar de trabajo elegantemente vestidos.

Todo esto sucedió por este sector antes de que se cerrara el Puente Ortiz a la comunicación vial decisión que para mí ha sido nefasta para la ciudad causando un grave deterioro al entorno del mismo y con grandes efectos hoy en día sobre la Avenida 6N y todo el centro de la ciudad motor de nuestra economía.

Podría ser que maquiavélicamente las intenciones hayan sido las de valorizar las tierras al sur de la ciudad a donde desde hace muchas administraciones se les da prioridad a los presupuestos de inversión hacia esos sectores.

No tenemos que ir muy lejos para ver las diferencias del significado de la inversión cuando cruzamos el Puente de la Cervecería en la Calle 8 y nos encontramos con enormes inversiones representadas en modernos y bellos edificios. Por lo contrario en la Calle 12 el panorama es triste, ver edificios emblemáticos como el Zaccour convertidos en el deterioro total da pena y vergüenza ajena. Pasar uno por este hermoso edificio de bella arquitectura y ver que desde la entrada de uno de sus locales se eleva una rampa para estacionar motos en el mesanine del mismo es como del mundo de Ripley.

Recomendaría a los que pasen por este lugar no dejar de apreciar las hermosas líneas de sus fachadas y ver el mármol Italiano de Carrara de color púrpura que decora sus paredes. Es un tesoro, solo que no lo vemos; Que la calle 12 entre carrera 3 y 4 se inunde todos los días de humo en horas de la mañana ya esos olores no se los aguantan ni los lustrabotas del lugar; Casinos de mala Muerte parece que no le traen sino mala suerte a sus clientes. Ya no existe el Hotel Nueva York y si nos devolvemos al Parque de La Maria 30 años llevan bebiendo Pipo los “dueños” de las bancas que ocupan el lugar.

Todo esto porque por ahí la tierra no vale nada. Algunos arquitectos se rasgan las vestiduras tratando de imponer su criterio de peatonalizar todo pero no es la solución Integral cuando se toman decisiones que favorecen a unos pocos y perjudican a muchos.

No es posible crear valores cuando al tener las vías cerradas logramos que el antiguo barrio Sucre ahora se traslade con sus vicios al sector de La Ermita y el precio de la tierra que por los años 50 y 60 era la más costosa en Colombia hoy no lo sea.

37 Puentes cruzan el Río Sena en Paris, uno de ellos monumento nacional, el Bir Hakim desde 1878 ha soportado la carga de permitir pasar peatones, carros, motos, bicicletas y el Metro porque los parisinos saben lo que representa la comunicación vial para el valor de la propiedad.

Al Río Chicago lo cruzan 52 Puentes construidos en diferentes épocas, todos móviles y casi cada calle se disputa tener un puente con el mejor servicio. La función de todos esos Puentes es unir la ciudad.

Aquí en Cali por caprichos y decisiones mal tomadas después de haber invertido$ 180.000.000 de pesos en hacer una vía para el MÍO sobre el Boulevard de la Avenida Colombia, la administración anterior la clausuró y en un solo día se impuso el tema de unas “mesitas para vender unas cervecitas ” y ya no sabemos que hacer con ese dolor de cabeza que nos representa la obra más bella hecha en Cali en este siglo.

No hace pocos días el visionario arquitecto Juan Felipe Cadavid nos decía que en la calle 25 y 26 sobre el Río Cali habiendo excelente comunicación vial; proponía unas plataformas que unan la antigua sede de la Licorera con la terminal de Buses y la Clínica Nuestra Señora de Los Remedios; excelente propuesta que si la comparamos con lo que sucede en el Puente Ortiz la situación es al contrario; excelente comunicación peatonal pero pésima comunicación vial y sus efectos ya los conocemos.

Entre tanto seguiremos suicidándonos haciéndole los mandados a los urbanizadores del sur cuando el Centro y Norte de la ciudad tiene tantas posibilidades y de paso borrando nuestro sentido de pertenencia e identidad.

Juan Pablo Suárez Fiat

https://www.facebook.com/jpsfiat/videos/10154399156377713/