Revista Digital CECAN E3

Examinar. Entender. Evaluar

Política monetaria como medida contracíclica

Las decisiones de política monetaria han desempeñado un papel muy importante en la dinamización de la economía en cada ciclo económico. Normalmente la reducción de tasas de interés (el costo del dinero) ha sido con frecuencia la herramienta más utilizada, la lógica es muy sencilla: Al disminuir costo del dinero en el mercado, se facilita el acceso al mismo, lo que a su vez contribuye a la inversión y generación de riqueza. Recordemos que la economía es cíclica y la misma pasa por diferentes fases a través del tiempo: Recuperación, Expansión, Auge, Recesión y Depresión. La reducción de tasas de interés dinamiza la economía en esta última fase.

Después de la crisis del 2008, los principales Bancos Centrales del mundo implementaron herramientas de política monetaria no convencionales con los programas de recompra de activos, dada la imposibilidad de seguir disminuyendo las tasas de interés por debajo de 0%. Los Bancos Centrales compran activos financieros e inyectan liquides al mercado.

En la emergencia sanitaria y financiera del SARS – CoV 2, el comienzo del nuevo ciclo económico, se ha hecho indispensable proveer de liquides el mercado para mantener los pagos, la cadena de suministro, soportar el golpe económico del segundo trimestre y en general, mantener el aparato empresarial del país.

EL Banco de la República ha ido más allá que los otros Bancos centrales de la región implementando un programa de recompras activos financieros[1], además de otras medidas como: i) disminución de 1 punto porcentual en las tasas de interés, pasando de 4,25% a 3,25% a comienzos de mayo ii) disminución del encaje bancario iii) ventas de dólares NDF iv) entre otras.

Estas decisiones que contribuyen a la generación de liquidez en el mercado, si bien son necesarias, tienen dos complicaciones: i) Las tasas de interés en los principales países del mundo se han mantenido en mínimos históricos comprometiendo la rentabilidad y la sostenibilidad financiera de los Bancos en el largo plazo ii) La generación de liquidez vía reducción de tasas de interés es lenta y lo es aún más para las MiPymes, que representan el 90% de las empresas en Colombia.

Es cierto que en Colombia no hemos alcanzado tasas de interés cercanas a 0%, ni al mínimo histórico del 3%, pero considere la globalización y que el mundo está interconectado, lo que mañana ocurre en otro país nos puede afectar directa o indirectamente en el nuestro.

Las MiPymes requieren liquides inmediata y su sostenibilidad financiera de largo plazo depende de ello, además que es bien sabido la dificultad que tienen las mismas para acceder a las fuentes de financiación. Esto se puede evidencia en la “Gran Encuesta a las Microempresas GEM” de Anif, en la cual se muestra que el 54% de los prestamos a las microempresas industriales provienen de Familia, amigos o prestamistas informales, microempresas comerciales 37% y microempresas de servicios 24%.  

Programas como el PAEF (Programa de apoyo al empleo formal), que entregará hasta el 40% de un SMLV por cada trabajador, si bien es necesario, no es suficiente.

El Fondo Monetario Internacional propone crear una entidad pública temporal que, por medio del gobierno y el Banco central, respalden los prestamos de las MiPymes otorgados por la Banca comercial. Propuesta que debería estudiarse.

Las herramientas de política monetaria son necesarias para sobreponernos de la actual crisis financiera, no obstante, se deben idear mecanismos y estrategias que permitan llevar la liquidez al grueso del aparato empresarial colombiano.


[1] Información proveniente de la presentación del Banco de la Republica del Comité consultivo Suroccidente.

Manuel Vásquez

@Mvas633