¿Por qué tenemos que sufrir?

¿Por qué diablos nos trajeron a esta vida a sufrir si yo no lo escogí? ¿Quién decidió por mi?

Una de las realidades más difíciles de aceptar y de entender es el sufrimiento. Es muy complejo porque no es posible acercarse a esta vivencia sin conectarla con otros temas en los que la trascendencia o el más allá forman parte del mismo tejido.

Venimos a la vida a aprender. Existen muchas vidas (Ian Stevenson lo escribe) y la vida es como un colegio donde hacemos curso (de dolor, aprendizaje y sufrimiento) para ir creciendo en conciencia. Conciencia que no es inteligencia.

Despertar, salir de un automático en que se vive se logra a través de golpes como la pandemia. Pero todos no estamos en el mismo nivel de conciencia -como en el colegio donde hay varios grados-.

El sufrimiento es aquello que nos frena, que nos impacta y nos ayuda a caer en cuenta lo que significa “despertar conciencia”. Por ejemplo, la epidemia nos está ayudando a despertar como civilización. No es asunto solo de gobiernos. Este sufrimiento es para despertar, para ver situaciones que antes no captábamos, para decidir si queremos seguir viviendo igual.

Conocí un hecho impactante: el sufrimiento de los animales lo asumimos al comer su carne y de allí surgen varias enfermedades en nuestro cuerpo. Energéticamente estamos conectados y la naturaleza nos lo está cobrando. El cambio climático ya está aquí pasando su factura. No tienes que creer ni estar de acuerdo pero esta información es otra forma de mirar lo que nos riera. Estamos sufriendo porque tenemos que aprender a cuidarnos, a cuidar a los otros incluida la naturaleza.

El abuso nos trajo hasta aquí…de cada uno depende si lo queremos prolongar o si construimos un mundo diferente. No es con resoluciones gubernamentales: es con el proceso de conciencia de cada quien. Entonces podrás asimilar el por qué y el sentido del sufrimiento.