Por: Valentina González González
“Se calcula que una de cada ocho personas en el mundo, tiene al menos un tatuaje, pero la cifra aumenta”, afirmó la BBC Mundo. Desde ser llevados por integrantes de tribus antiguas para representar el paso de la niñez, hasta ser utilizados como un símbolo de poder místico, las perspectivas de los tatuajes han cambiado con el paso de los años.
“Realmente en la Biblia hay un único pasaje que habla de los tatuajes, pero es muy claro dando entender que aquel que tatúe su cuerpo no morará en el reino de los cielos”, expresó, Edwin Zuluaga, un pastor de la iglesia cristiana Roca y Vida. La religión suele ser en lo que las personas más se apoyan para mostrar su rechazo hacia los tatuajes, asegurando que rayarse la piel con tinta son ‘cosas del diablo’, así lo expresó Helena Casanova, una
ama de casa, “no estoy de acuerdo con los tatuajes y Dios tampoco, esas son cosas del diablo”.

El ‘tebori’ es una de las técnicas más antiguas de tatuado a mano.
“Una vez iba en el bus, una señora vio mis tatuajes y se alejó de mí”, comentó Juan David Tafur, tatuado.
Laura Leyton, dermatóloga, cree importante recordar que: “Para realizar un tatuaje las agujas deben penetrar la primera capa de la piel, por lo que puede ser posible contraer infecciones”, este es un efecto secundario que se puede generar al hacerse un tatuaje de una manera indebida.
De acuerdo con lo anterior y pese a las perspectivas, el auge de los tatuajes no ha disminuido, por el contrario, hoy en día existen cada vez más personas con tinta en su piel. Ese mismo avance lleva a que tatuadores como Luis Hernando Valencia, innoven en este campo y obtén por ampliarlo con salidas como abrir una academia para que las personas aprendan a tatuar, “sentí la necesidad de impartir esta pedagogía porque era algo que no había en Cali y hacía falta”, dijo Valencia.
Pese a todo el desarrollo que han tenido los tatuajes, esto no implica que situaciones de retroceso, en su aceptación, no se hagan presentes, “una vez iba en el bus, una señora vio mis tatuajes y se alejó de mí”, comentó Juan David Tafur, tatuado.
El tatuaje más antiguo es de un cazador neolítico del 5300 a. de C. Se encontró en 1991 enterrado en un glaciar en la frontera entre Austria e Italia.
El estrato social es algo que también entra a jugar con los tatuaje, ya que estos pueden llegar a ser costosos y hay personas que invierten millones, “no tengo una cifra exacta, pero en tatuajes he gastado cerca de 7 millones de pesos, eso vale mi piel”, aseguró Diego Gallardo, tatuado.
Hoy por hoy, el tatuaje es visto como un arte; sin embargo, siempre rondarán opiniones negativas sobre ellos, Nicolás Vázquez, aprendiz de tatuador, expresó: “Yo creo que los tatuajes son como los grafitis, antes se veían como vandalismo y ahora son arte, un tatuaje bien hecho, también es arte, pero no todos van a pensar así porque no se puede tener contentas a todas las personas”.
Pensamientos como estos de ver los tatuajes como arte, son los que motivan a miles de personas a tatuarse, como es el caso de Juan David Tafur, un joven de 20 años que decidió convertir su cuerpo en un lienzo.
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