Revista Digital CECAN E3

Examinar. Entender. Evaluar

Las fórmulas mágicas de los tributaristas de la OCDE

Los integrantes de la comisión de reforma del sistema tributario colombiano le presentaron al presidente Duque un conjunto de recomendaciones dirigidas a generar varios cambios en el sistema tributario vigente que, según se dice:, “no está alinderado con las normas prácticas internacionales”. (Portafolio de marzo 18 de 2021).

Al respecto, la mencionada comisión propuso como base para incrementar los recursos del Estado, entre otros aspectos, ampliar la base gravable, con lo cual un número mayor de colombianos de ingresos bajos y medios tendrían que pagar más impuestos y en especial aquellos que se encuentran en la informalidad, pero que al entrar en la “formalidad participarán del sistema tributario, contribuyendo con el pago de sus impuestos”.

Así mismo se propuso extender el IVA a los consumidores de toda clase de productos, bienes y servicios, con algunas excepciones respecto de ciertos productos como la carne, los huevos y la leche que están exentos del pago de este impuesto.

Está claro que con dicha propuesta se causará un grave impacto social que se verá reflejado en el alza de los productos que se ofrecen en el mercado afectándose con ello la capacidad de compra de los consumidores.

Por otra parte, la comisión de expertos y asesores de la OCDE recomiendan, aunque de manera gradual, se eliminen los beneficios tributarios e incentivos a las empresas y personas de altos ingresos al igual que a las pensiones, al mismo tiempo que manifiestan que se debe beneficiar a los sectores más vulnerables de la sociedad incluso devolviéndoles un porcentaje del impuesto del IVA, lo que por supuesto no redimirá su carácter regresivo, inequitativo e injusto y no obstante que con su extensión a todos los productos se disminuya la demanda social especialmente en este momento de crisis económica y sanitaria por la que atraviesa el país.

Igualmente, la mencionada comisión plantea la necesidad de eliminar el ICA y el gravamen para las transacciones financieras más conocido como el 4 por mil, que de ser un impuesto transitorio se convirtió con el tiempo en un gravamen definitivo iniciándose con el cobro del 2 por mil. De adoptarse estas medidas el Estado dejará de percibir varios billones de pesos que recaudan y manejan los bancos, lo que hace que dichas reformas no sean del agrado del sector financiero. En tanto se dice que se deben gravar con el impuesto del IVA las transacciones que se realizan al interior de las zonas francas, lo que por supuesto tampoco es del agrado de los sectores que manejan el comercio exterior de las importaciones y exportaciones de toda clase de bienes transables.

Finalmente, los comisionados hacen mucho énfasis en la necesidad y urgencia de aumentar los ingresos del Estado para promover la reactivación económica y atender los efectos de la crisis sanitaria derivada de la pandemia del coronavirus, que conjuntamente con la crisis económica, tiende a prolongarse en el tiempo con lo cual todo parece indicar que las fórmulas mágicas que se proponen no serán suficientes para recuperar las condiciones económicas y fiscales del país al frente del cual su clase dirigente ha demostrado su incapacidad para dirigir los asuntos del Estado y de la sociedad y solventar sus necesidades, en tanto que los colombianos se encuentran sumidos en la incertidumbre, la incredulidad en sus instituciones y gobernantes, lo que por lo demás hará imposible establecer un equilibrio entre los gastos y los ingresos del Estado en medio del creciente y abultado déficit fiscal, el aumento exorbitante de los gastos generales y de funcionamiento, mientras se reduce el gasto social y el monto de las regalías en favor de los municipios y regiones más apartadas y abandonadas del país.

Veeduría ciudadana por la democracia y la convivencia social

Pablo A. Borrero V.                          Luz Betty J. De Borrero