Salud emocional (105)

¿De qué me agarro?

El sentido de la vida significa tener algo porque vivir. Algo o alguien que muestre que el día a día tiene sentido. Algo o alguien que de esperanza para no sentir que la vida se arrastra, que la vida pasa y que todos los días se volvieron planos.

Muchas personas hoy viven la desesperanza. Estamos ante la opción de encontrarnos con la tasa de suicidios más grande de la historia. ¿Para qué se vive? Y “peor dolor” Si no existe ninguna creencia espiritual. ¿Para qué se vive? Entonces, es necesario agarrarse de algo, de alguien. Hay que buscar asideros físicos, emocionales, espirituales o materiales. Lo importante es encontrar ese bastón que nos ayude a caminar, que nos ayude a pasar el momento difícil. Debemos encontrar algo que nos permita conectar de nuevo con la vida: ¿Un hijo? ¿Una amiga? ¿Un negocio? ¿Un servicio? ¿La naturaleza? ¿Una creencia religiosa? ¿Un deporte? ¿Un estudio profesional? ¿Los  planes de viaje? ¿Una pareja? ¿La familia? Cualquier cosa, por simple que parezca, pero en este momento lo más importante, es darle sentido a la vida, encontrando una motivación. Se requiere que cada quien busque (y encuentre) algo por simple o superficial que parezca que le impulse. Se ven muchísimas cifras económicas, de desempleo, curvas  epidemiológicas, pero poco se evalúa el sinsentido de la vida para muchos. Nada porque  vivir, lo que traducido en salud emocional, significa depresión y suicidios. La avalancha de casos de jóvenes, universitarios, personas de la tercera edad, que podrían considerar que se les quitaron las alas para vivir, son infinitas. Se siente desesperanza, por ello es tan importante agarrarse de algo o alguien. Puede ser temporal, lo importante es que exista en el presente. ¿Qué tanto se sostiene en el futuro? No te preocupes por esa respuesta. Basta con que hoy ese bastón te sostenga y te ayude a dar el próximo paso. Paso a paso habrá futuro pero hay que agarrarse  de un bastón. ¿Cuál es el tuyo?

Por: Gloria H.