Revista Digital CECAN E3

Examinar. Entender. Evaluar

Salud emocional (152)

Por: Gloria H.

El desmadre

Como escribió Verónica Gómez, va a comenzar en septiembre el periodo que los epidemiólogos marcaron como “¡Ya qué hijueputas!”, es decir el desbordamiento total. Como si hubieran abierto las puertas de la cárcel, más de uno se tirará literalmente a la calle a intentar vivir, en un día lo que no hizo en 150. Imagínese la desproporción, imagínese la locura contenida a la que le dan permiso de salida. No, no será una reglamentación del gobierno, ni la policía, ni el estad los que lograrán controlar ese desmadre.

No existe fuerza humana que pueda contener este desbordamiento. Solo… será cada uno, cada quien es el único que podrá manejar sus emociones. Cada uno tendrá el poder de manejar ese rio interior represado o dejarse llevar por una conducta desbordada que le generará más complicaciones. Parece increíble pero solo el orden o control de emociones permitirá disfrutar ese momento.

El desbordamiento lo enreda todo. Como quien sale de un secuestro y se encuentra frente a una mesa llena de comida. Si intenta comer de todo, será segura la indigestión. Pero, si tienes mesura podrás disfrutar realmente de lo que escojas comer.

Son días diferentes donde podremos valorar muchísimas situaciones de las ya vividas que tendrán un sabor diferente porque el no haberlas tenido y volverlas a vivir, les dará una dimensión especial. No tendremos algunos referentes, locales vacíos, almacenes inexistentes, personajes de lo cotidiano que ya no están.

Es la nueva normalidad, la nueva vida que tendremos que enfrentar. Pero lo importante es la mesura. Todo podrá parecer diferente lo importante es vivirlo con prudencia. A veces tan desbordados en nuestras emociones; es importante reconocer que solo la mesura nos permitirá un regreso tranquilo. El desmadre solo genera más caos…