Revista Digital CECAN E3

Examinar. Entender. Evaluar

Salud emocional (173)

Venganza

Japón tiene institucionalizada una empresa de «venganzas», industria que pretende aliviar el sentimiento que experimenta un ser humano cuando ha recibido una agresión y quiere «sacarse el clavo». Para muchos vengarse es un placer prohibido con el que se espera calmar el propio dolor. En la empresa de venganzas japonesa está prohibido matar. No es posible apostarle a la vida humana. De allí en adelante, todas las demás agresiones pueden «cobrarse». Por ejemplo -y una de las más apetecidas- la infidelidad. Si su compañero o compañera le ha sido infiel, «Venganzas S.A.» busca un amante para enredar al amante de su pareja y así su pareja pueda experimentar lo que usted sintió cuando este o esta jugaron con usted. Al infiel le dan donde le tienen que dar, en el mismo sentimiento que tanto le dolió a usted, para que la agresión quede verdaderamente cobrada. Algo así como ojo por ojo y diente por diente.

En Colombia «Venganzas S.A.» sería un rotundo y contundente éxito. Por el lado de las llamadas infidelidades habría un filón por explotar. Imagínese la cola de solicitudes, de hombres y mujeres, demandando los servicios de venganza para cobrarse la humillación que produce que lo o la cambien por otro u otra. ¿Qué tal un «Venganzas S.A.» de enfoque político? ¿Este sería impactante por qué cuantos colombianos no desearían pasar factura en este momento y “cobrarse” los engaños de las promesas políticas? Si existen muchas motivaciones para desear una venganza porque una traición desestabiliza al máximo. Solo que nadie está vacunado contra esa eventualidad y aprender a vivir es aprender a perder, aprender a recibir una traición y saberse levantar.

Sí, la venganza no es un buen sentimiento, pero existen momentos en que pareciera que se disfruta sintiéndolo. ¿Pero la venganza en definitiva es la incapacidad para saber perder?. ¿En este mes del amor y la amistad le gustaría cobrar alguna “deuda” o su corazón está verdaderamente limpio para aceptar el presente y mirar para adelante? Dice mucho de cada quien, de lo que se guarda, si se logra no tener facturas pendientes y por el contrario, casi que agradecer el mal momento por lo que se pudo aprender de él. ¿Su corazón está limpio y en paz?

Por: Gloria H.