Revista Digital CECAN E3

Examinar. Entender. Evaluar

¡Y la Psicología, allí!

Salud emocional

La urgencia de salvar vidas, aunque parezca un contrasentido, es salvar cuerpos. Que la gente no muera. Recuperando los cuerpos, se ha cumplido la tarea. Desde la perspectiva de la tercera dimensión, si no hay cuerpo no hay nada… pero resulta que no nos agotamos en el cuerpo. ¡Hay mas! Están las emociones, los sentimientos, la memoria, el lenguaje, la historia personal, familiar… Hay tanto “dentro” del cuerpo que no concluye solo con la mirada biológica. Existe personas contaminadas en hospitales y clínicas. Otros, en sus casas, manejando su propia cuarentena. Pero es toda una sociedad (¿una civilización?) la que se enfrenta a la necesidad urgente de ser oída, de contar con un interlocutor que le ayude a digerir qué es lo que sucede.

Todos no llegamos a esta crisis con la misma maleta. Se necesita ayuda para lo “otro” que guardan los cuerpos. Y es entonces cuando la necesidad del apoyo psicológico es tan indispensable como el cuidado de lo biológico que nos construye. La Ciencia, que aun cuando no es infalible y presenta limitantes, si es mas confiable que las opiniones de tantos que consideraron que bastaba con hablar de “lo que yo creo” para dar cátedra. Sobre todo en Psicología los abusos fueron desproporcionados porque como en apariencia es un tema “vivido por todos”, parecía que cualquiera podía jugar a ser psicólogo. “Mis amigos me consultan y soy buena consejera” es una de las expresiones preferidas para justificar el opinómetro.

Las crisis exacerban lo guardado como si alborotarán fantasmas que tenemos en el interior, como quien nos despoja de una careta. Es un momento definitivo para la Psicología porque las crisis emocionales pueden ser tan letales como las físicas. No somos compartimentos (alma, cuerpo, emoción) sino seres integrales que necesitan entender y sobre todo aceptar qué es aquello que nos corresponde vivir. La Psicología es una ciencia que toca varias ramas de la condición humana, en especial ahora su contacto con el mundo espiritual (psicología transpersonal) es fundamental. Como si todos estuviéramos abocados a preguntarnos por el sentido de la vida. Esto liga necesariamente con la muerte. Una cosa lleva a otra, papa, mama, árbol genealógico, experiencias, traumas, expectativas, ilusiones, frustraciones. Y entonces, ¿quién me guía? Es momento para el encuentro personal, para ventilar secretos y silencios.

Desde el mundo racional hay resistencia: “nadie me enseña a manejar mi vida”, “los psicólogos son mas locos que uno”, rezagos de la mirada patriarcal (incluída la vicepresidenta) donde bastaba la razón para defenderse. Fatal error.

Con crisis o sin crisis, los psicólogos están llamados a reparar los faltantes de la familia, la educación y la sociedad. Son indispensables. Por eso, aquí estamos.

Gloria H – Psicóloga